FLUIDEZ, RITMO Y VOZ
La Disfemia o tartamudez se trata de una alteración de la fluidez del habla. El patrón característico son las repeticiones al inicio de palabra /ca-ca-ca-casa/ /p-p-p por favor/. Puede aparecer o no tensión muscular.
En los niños, existe un periodo entre los 2 a 4 años, en el que puede aparecer «Disfemia evolutiva». Debe consultar un logopedia si la tartamudez no a remitido pasados dos años de su aparición o si se observan síntomas ansiosos.
En adultos con habla normal puede aparecer la Disfemia por varias causas.
Alteraciones en la fluidez: Según J. Sangorrín, las alteraciones en la fluidez de habla o disfluencias, pueden tener como causa diversas circunstancias patológicas en el sistema nervioso.
- Tartamudez neurogénica: La disfluencia del habla, se inicia a partir de una lesión o enfermedad cerebral en una persona que previamente tenía unas características de habla normales.
- Tartamudez evolutiva: En este caso, la tartamudez se inicia en la infancia, entorno los 2 y 4 años habitualmente, coincidiendo con el periodo de explosión del lenguaje (aumento de vocabulario y estructuras sintácticas). La conducta más frecuente es la aparición de repeticiones de parte de la silaba o prolongaciones de los sonidos al inicio de la frase. También se pueden observar aumento de la tensión muscular y conductas de esfuerzo, como balancear la cabeza. Cuando el trastorno persiste durante más de dos años a partir del inicio, se cronifica, pudiendo aparecer síntomas más ansiosos.
- Disfemia: Se trata de un síndrome clínico caracterizado por disfluencias anormales y persistentes del habla, acompañadas por peculiares patrones conductuales, cognitivos y afectivos. La persona con disfemia, sabe exactamente lo que quiere decir, pero es incapaz de decirlo con fluidez. Emite de manera involuntaria repeticiones, prolongaciones o interrupciones en los movimientos productores del habla.
- Tartamudez psicógena: A diferencia de la disfemia, se inicia en adultos y no tiene neurológica. Resulta un trastorno poco frecuente, cuya causa la suele constituir un episodio estresante.
Alteración del ritmo de habla: en función de la velocidad del discurso, podemos distinguir:
- Taquifemia o taquilalia: Se trata de un patrón de habla con exceso de ritmo, forma precipitada, pobre coordinación fono-respiratoria y excesivamente rápido al hablar. Suelen aparecer omisiones de sílabas e incluso palabras completas. A veces puede afectar a la inteligibilidad del habla.
- Bradifemia o bradilalia: este término engloba a un patrón de excesiva rapidez al hablar, con carencias en la prosodia o melodía del discurso. A veces puede afectar a la inteligibilidad del habla.
El término Disfonía hace referencia a las alteraciones de la voz. Engloba a las patologías que comparten los siguientes síntomas: ronquera, voz monótona, temblorosa, episodios de afonía, sensación de falta de aire al emplear la voz
Alteración de la voz o disfonía: Puede afectar a una o varias de las cualidades de la voz: duración, intensidad, timbre o tono, dificultando que produzcamos el sonido de manera adecuada. Presente en todas las edades. atendiendo a su causa, podemos distinguir:
- Disfonía orgánica: Alteración que tiene como origen una lesión anatómica de los órganos involucrados en la fonación. Algunas de las causas de la disfonía orgánica pueden ser, los tumores benignos (nódulos, pólipos, quistes), tumores malignos, enfermedades endocrinas, autoinmunes o del aparato respiratorio.
- Disfonía funcional: Tiene como causa un funcionamiento inadecuado del mecanismo fonatorio sin que exista lesión anatómica que lo justifique. Un uso o abuso inadecuado de los órganos implicados en la emisión de la voz, pueden originar este tipo de disfonías.
- Disfonía traumática: Causada por un traumatismo externo (accidente) o interno (intubación, lesiones quirúrgicas)
- Disfonía audiógena: Alteración de la voz secundaria a un déficit auditivo.
- Disfonía psicógena: tiene como origen un trastorno psicológico o emocional (estrés, ansiedad) que afecta a la correcta emisión de la voz sin alteraciones estructurales que lo justifiquen.